=== MEDIDAS EXCEPCIONALES PLANIFICADAS ===
Ante la incierta e imprevisible evolución de la alerta sanitaria provocada por el COVID-19, la Universidad de Vigo establece una planificación extraordinaria que se activará en el momento en que las administraciones y la propia institución lo determinen atendiendo a criterios de seguridad, salud y responsabilidad, y garantizando la docencia en un escenario no presencial o parcialmente presencial. Estas medidas ya planificadas garantizan, en el momento que sea preceptivo, el desarrollo de la docencia de un modo más ágil y eficaz al ser conocido de antemano (o con una amplia antelación) por el alumnado y el profesorado a través de la herramienta normalizada e institucionalizada de las guías docentes.
=== ADAPTACIÓN DE LAS METODOLOGÍAS ===
* Metodologías docentes que se mantienen y modifican
En el caso de ser necesario, se utilizarían mecanismos de aula virtual para llevar a cabo clases teóricas y prácticas. Una vez se haya cogido la dinámica de clases y trabajo, a medida que avanza el curso el alumnado tendría capacidad de realizar las tareas de una forma más independiente.
* Mecanismo no presencial de atención al alumnado (tutorías)
Se utilizaría correo electrónico y en caso de no ser suficiente, se procedería a utilizar algún sistema de comunicación online a modo reunión.
* Modificaciones (si proceden) de los contenidos a impartir
Los contenidos se mantendrán independientemente de la situación.
=== ADAPTACIÓN DE LA EVALUACIÓN ===
Las pruebas se mantendrán de la misma forma que el curso sea presencial o no presencial, ya que no se vería afectado a la hora de realizar la evaluación.
=== OTRA INFORMACIÓN ===
Se estima una media de unos 30 alumnos en la asignatura teniendo en cuenta datos de años anteriores.
En el caso de las sesiones de aula, suele asistir un 70% del alumnado, por lo cual estas se podrían desempeñar respetando las distancias de seguridad en el aula asignada a la asignatura de forma presencial. En todo caso y de ser necesario, la docencia de horas de teoría se podría realizar de forma no presencial a medida que va avanzando el curso; una vez explicada la dinámica de clases se podría pasar a trabajar por medio de aulas virtuales.
En el caso de las clases de laboratorio se alternan semanas de una y dos prácticas de forma que se completen las 15 sesiones. Al ser dos subgrupos desde teoría, suele haber una media de 10-12 personas en el Aula de Informática-4 o en el Laboratorio de Ingeniería Mecánica, por lo que igualmente se podrían mantener las distancias de seguridad, aunque disponer del aula de teoría para hacer las prácticas también sería una opción que solucionaría el tema. De igual modo, si se hacen las primeras prácticas de forma presencial para que los alumnos se familiaricen con el software a utilizar y cojan soltura, se podrían plantear el resto de las prácticas de forma no presencial. Dicho esto:
-La presencialidad en las clases de laboratorio va a suponer un mayor aprovechamiento de la materia por parte del alumnado, ya que será más fácil solucionar las dudas que surjan durante su trabajo e interactuar en discusiones de aula acerca de resultados obtenidos y posibles alternativas.
-Se plantean en las primeras semanas aquellas sesiones que requieren de más trabajo por parte del profesor, y hacia el final aquellas sesiones que requieren de un trabajo más autónomo por parte del alumno.
-Se han intercalado con la teoría de forma que se darían las 15 prácticas entre las semanas 2 y 11 (semana 1 apenas contenido para explicar la materia y sistema de trabajo) y por tanto acabando con dos semanas de antelación.
-Los alumnos necesitan licencias de software para poder hacer el proyecto y trabajar desde casa o desde el aula de teoría en caso de mover las prácticas al aula.
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