La evaluación ha de programarse en consonancia con los objetivos y medios, y de acuerdo con ellos. Su realización constituye la última fase del proceso de aprendizaje, y debe entenderse en sentido amplio, ya que su objetivo es triple: a) comprobar el cumplimiento de los objetivos; b) orientar y motivar al alumno; c) calificar.
Conforme a ello, la nota final de la asignatura se calculará sobre los resultados de la evaluación continua (asistencia a clases teóricas y prácticas, tutorías, realización de trabajos, controles periódicos...), que supondrán el 30%, más el resultado de la calificación obtenida en el examen escrito de final de curso, que supondrá el 70%.
Los alumnos dispondrán de un plazo adecuado –ajustado a la normativa vigente- para proceder a la revisión o a cualquiera otra aclaración relacionada con los exámenes efectuados así como con las calificaciones obtenidas.
Los alumnos que, por causas extraordinarias y debidamente justificadas comunicadas con antelación, no puedan acogerse a la modalidad de evaluación continua, serán evaluados solamente por medio de un examen final: la calificación se obtendrá en su totalidad del examen final.
La calificación obtenida en la evaluación continua se mantendrá para todas las convocatorias del curso académico 2011/12. |