Las empresas desarrollan sus actividades en un entorno globalizado y, por tanto, dinámico y complejo, que está en constante evolución y por el que fluyen grandes cantidades de información. Para poder sobrevivir y progresar en este entorno altamente competitivo, la innovación se convierte en un elemento clave para la organización, independientemente de su dimensión y del sector en el que opere. La innovación no tiene por qué referirse, necesariamente, a grandes proyectos y logros, sino que pequeñas modificaciones en productos, servicios o procesos pueden representar una importante ventaja competitiva para la empresa. En cualquier caso, resulta de vital importancia, sobre todo en el caso de las pequeñas y medianas empresas, instaurar el espíritu innovador en la cultura de la organización, de tal manera que todos los agentes que la integran sean conscientes de que se puede incrementar su potencial de innovación si se dedican suficientes recursos y capacidad directiva a gestionar un proceso al que se ha de conferir naturaleza estratégica.
Esta asignatura tiene como objetivo que el alumno adquiera los conocimientos, técnicas y destrezas necesarias para realizar una correcta gestión empresarial de la innovación, en la que se planteen los procesos de innovación tecnológica como procesos estratégicos, así como para una adecuada interacción y aprovechamiento de sinergias con los diferentes agentes del sistema de I+D+i y con otras organizaciones. De esta manera, el alumno aprenderá a detectar y describir las tecnologías empleadas en su entorno, a conocer y valorar los programas de dinamización de la innovación ofertados dentro del sistema de I+D+i y a promover e incentivar la cultura de la innovación en la organización. Por último, se familiarizará al alumno con la creación de empresas de base tecnológica, para lo que se presentarán algunas experiencias destacadas.
